Neoyorquinos han olvidado casi $100,000 en el Subway y autobuses

Se calcula que cada día en Nueva York se movilizan más de 6 millones de pasajeros entre las líneas del Subway y las rutas de autobuses, y aunque la gran mayoría sale del sistema de transporte con las pertenencias que entró, hay muchos olvidadizos, que tal vez por el corre-corre de la ciudad, sus múltiples preocupaciones, o simplemente por estar pensando en pajaritos en el aire, pierden sus objetos en un abrir y cerrar de ojos. Así de literal.

Eso le pasó hace un par de semanas a Keenan Kline, quien en un descuido que todavía no logra explicar, perdió en menos de 15 segundos un morral con varios artículos personales y una maleta con ropa.

“Yo estaba en el tren 3 y cuando vi que ahí mismito estaba el tren 1, al que necesitaba hacer transfer, me bajé corriendo y me monté. Ahí adentro, en un segundo me di cuenta que había dejado mi mochila en el otro tren, y al ver que iba a cerrar la puerta, en vez de salir del tren 1 con mi maleta, corrí impulsivamente a tratar de recuperar mi morral y perdí las dos cosas. Dejé una cosa en un tren y la otra en el otro”, confiesa el joven, quien en medio de su preocupación, se enteró que todavía hay una esperanza para recobrar sus artículos.

Aunque tal vez muchos de los usuarios del metro no lo sepan, la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) tiene una Unidad de Objetos Perdidos, ubicada en la parte baja de la estación de los trenes A,C y E, en la calle 34, adonde mensualmente llegan unos 3,000 artículos que la gente olvida y que de lunes a viernes atiende al público para ayudarlos a ver si sus cosas están allí. Hasta el pasado 30 de noviembre habían llegado 30,635 artículos.

“Vine a ver si tuve suerte y mi maleta y mi morral están aquí. Estoy cruzando los dedos”, confesó el joven, quien era uno de los varios usuarios del metro que el jueves pasado al mediodía estaban en la Unidad de Objetos Perdidos, haciendo las diligencias necesarias con la ilusión de recobrar sus pertenencias.

Dejan miles de dólares ‘abandonados’
Anthony Marcial, supervisor general de la unidad, quien lleva más de 10 años trabajando allí, aseguró que a lo largo del año llegan todo tipo de objetos: algunos de mucho valor económico, otros con valor sentimental y otros que nadie jamás imaginaría que alguien pudiera haber olvidado en el tren o en un autobús. Y aunque parezca difícil de creer, el 2019 demostró que hay neoyorquinos descuidados con su dinero y otros muy honrados, pues casi $100,000 han llegado hasta el sitio de ayuda, donde la mayor parte ya fue entregada a sus dueños.

“Nosotros hemos entregado a los clientes en total este año, en dólares, como unos $54,000, lo que es la mayoría del dinero que llegó, es decir un 60%”, comentó el funcionario, quien agregó que a pesar de ello todavía hay un 40% de dinero en efectivo que los pasajeros han perdido que sigue sin reclamarse. “Esperamos un tiempo y si nadie viene, va para el Departamento del Tesoro”, agregó el supervisor, al tiempo que destacó que dependiendo el tipo de objeto y el valor que represente, los artículos que llegan allí se guardan por períodos que van entre 3 meses y 3 años.

“Algo que hemos visto además es que la gente está perdiendo muchos celulares. Calculamos que unos 500 celulares, muchos de ellos iPhone, llegan hasta aquí cada mes, y la mayoría no los reclaman, porque como es necesario esperar un tiempo para que las cosas lleguen, mucha gente no quiere estar sin celular”, agregó Marcial, explicando que una vez alguien olvida un objeto en el metro o el autobús, se toma un tiempo de entre una y dos semanas para que el artículo sea enviado a la unidad de búsqueda.

El funcionario comentó que con el auge de la telefonía celular y dispositivos más modernos, algo que ha disminuido considerablemente es la llegada de computadoras portátiles, que en otra época eran pan de cada día.

“Aquí llega de todo. Hemos visto hasta diamantes, bolsas de joyas, $15,000 en efectivo, muchas bicicletas que trabajadores olvidan y creen que no pueden recuperar, pero aquí tenemos muchísimas, maletas, billeteras y aunque me sorprendió muchísimo, llegó el bumper de un carro que está esperando a su dueño”, dijo el empleado de la MTA.

Más de 6,395 teléfonos perdidos
La administradora del lugar, Gwendolyn Sullivan, reveló que en lo que va corrido del año los teléfonos de 6,395 neoyorquinos que han perdido sus aparatos en el sistema de transporte han ido a parar hasta esa oficina, y advierte que perder algo es una situación que a cualquier persona le puede pasar en algún momento. “Yo misma he perdido ocas en el tren… he perdido varios zapatos”, dijo con una sonrisa.

El dominicano Junior Vásquez, quien trabaja hace varios años en la bodega de recepción de objetos perdidos confiesa que la Unidad no solamente es un grupo de funcionarios que esperan a que los pasajeros llegue a reclamar sus pertenencias sino que también tratan de contactarlos si hay algún dato a la mano.

“Nosotros llamamos cuando vemos que aparece un número telefónico o si hay una dirección nos comunicamos para hacerles saber que sus cosas están aquí. La gente no se imagina lo que nosotros sentimos al ver que muchos salen de aquí con una tremenda sonrisa y felices de haber encontrado sus cosas. Nos da mucha emoción de poder colaborarles, porque nadie quiere que se le pierdan sus cositas”, dijo el joven dominicano, mientras muestraba un par de dentaduras postizas y hasta prótesis de piernas que alguien olvidó en el metro.

“Uno no puede entender cómo a alguien se le olvidan estas cosas, pero pasa. Es real. Lo que más me ha sorprendido a mí es ver que llegan aquí sillas de ruedas, que son indispensables para muchos pasajeros. No entiende uno cómo las olvidan, pero uno después ve que tal vez por el estrés o como la ciudad se mueve tan rápido, la gente se eleva a veces y deja sus pertenecías”, agrega el dominicano, recordando que hace unos días se sintió muy contento cuando entregó a un pasajero con problemas de audición un audífono medicado que había perdido en el metro.

Juan Castro, quien trabaja en la Unidad de Objetos perdidos hace 11 años, confiesa que a pesar de la buena labor que hace la MTA para tratar de que los usuarios que pierden sus artículos los puedan recuperar, también se topa a diario con pasajeros que llegan allí con la esperanza de hallar sus cosas y se van con la cara larga.

“La mayoría de los casos de la gente que viene no encuentran lo que estaban buscando. Nosotros tratamos al máximo de ayudarlos, pero si no están sus cosas aquí no podemos hacer nada y eso duele”, comenta el salvadoreño, quien agrega con gracia que en cambio hay otros usuarios del sistema de transporte que agarran de costumbre perder sus cosas y ya se vuelven rostros conocidos.

“Hay varios que yo llamo la comunidad de los perdedores, que tienen aquí viniendo seguido por 10 años. Eso es más común de lo que uno cree, y muchos de ellos pierden sus cosas en los autobuses y creo que la gente es más honesta ahí que en los trenes, tal vez por que como se conocen más”, dijo el centroamericano.

Dan un consejo a los pasajeros…
Y a la hora de hablar del mejor consejo que puede darle a quien pierde algo en el tren, el hondureño Luis Sáenz, quien lleva apenas un año trabajando en el lugar, entrega un tip que muchos neoyorquinos no quisieran seguir pero que es vital para poder intentar recuperar sus artículos olvidados.

“Tienen que tener paciencia. Esperar a que pase el tiempo del proceso para que las cosas lleguen aquí y venir y hacer el reclamo”, comenta el joven, mientras sostiene un par de llaves que acaba de llegar y que es de los objetos que también suelen arribar cada día en unas enormes bolsas de lona que se llenan con los objetos de los descuidados. Otra de las reglas de oro, es que por más agradecidos que estén los pasajeros de recuperar sus pertenecías, no deben ofrecer propinas o regalos a los empleados de la Unidad. “No podemos aceptar eso. Nuestro mayor premio es verlos irse felices con sus cosas”, concluye Luis.

Artículos que llegaron en el 2019 a la unidad de objetos perdidos

  • 30,635 artículos llegaron allí hasta el pasado 30 de noviembre.
  • 6,395 de ellos fueron celulares.
  • 3,326 objetos llegaron en octubre, convirtiéndolo en el mes con más objetos perdidos.
  • 5,149 artículos de se han regresado a sus dueños.
  • 54,000 en dinero han sido recuperados por pasajeros olvidadizos.
  • 60% del dinero perdido que llega a la Unidad ya ha sido reclamado este año.
  • El 40%, unos $40,000, todavía no han sido reclamados.

Dónde reportar los objetos perdidos

  • Si un pasajero del Subway o los autobuses de Nueva York pierde u olvida un objeto en el sistema de transporte, puede dirigirse personalmente a la Unidad de Objetos Perdidos de la MTA que está localizada abajo a las plataformas de los trenes A, C y E, en la mitad de la estación y solicitar ayuda.
  • Los lunes, martes y viernes, la oficina atiende de 8:00 a.m. a 3:30 p.m.
  • Los miércoles y jueves, la oficina funciona de 11:00 a.m. a 6:30 p.m.
  • Los fines de semana y festivos la Unidad de Objetos Perdidos está cerrada.
  • Para obtener información vía telefónica, puede llamar al 511, todos los días de 6 a.m. a 10 p.m.
  • También puede hacer la solicitud en internet, a través de esta página: https://new.mta.info/lost-and-found

Detalles de una reclamación

  • Deberá dar una descripción detallada del artículo que perdió, además de datos como el tren o el bus en el que viajaba, la fecha y la hora.
  • Para reclamar un artículo perdido, deberá traer una identificación válida como la licencia de conducir, identificación Municipal de Nueva York, pasaporte, identificación de trabajo o ID de estudiante, etc.
  • Asimismo deberá completar un formulario de recibo del artículo perdido con su dirección e información de contacto.
  • Tenga en cuenta que el tiempo promedio que transcurre entre el día en que pierde su artículo en el sistema de transporte y es enviado a la Unidad de Artículos Perdidos, es de 2 semanas.
  • Los artículos que llegan al lugar, dependiendo del tipo que sea, permanecen allí entre tres meses y tres años.
  • Los artículos que no son reclamados durante el período de tenencia, son subastados y los ingresos generados ayudan a financiar el servicio de la MTA.
  • Los artículos en mal estado o perecederos, se botan.

El Diario