Una embarazada de 22 años de edad intentó quitarse la vida luego de que uno de sus hijos muriera por dengue.
La joven tomó una innumerable cantidad de pastillas, y fue encontrada por un pariente, quien la trasladó a un centro de salud, donde logró salvarse.
“Se llevaron mi luz, un pedazo de mi vida y ya no puedo más”, dijo la madre que aprovechó para pedir la mayor intervención de las autoridades para contrarrestar el dengue.
Su niño, de cuatro años de edad, fue llevado con fiebre a la emergencia de un centro de asistencia médica. Posteriormente fue trasladado de urgencia a ser atendido por especialistas de La Vega, donde falleció.
Los médicos de ese centro se quejaron de que los pacientes con síntomas de la enfermedad que son enviados desde Bonao, provincia Monseñor Nouel, llegan cuando prácticamente su cuadro de salud es delicado.
En menos de un mes han fallecido aproximadamente tres niños en esta demarcación geográfica, lo que mantiene a las familias alarmados.
Listín Diario