Israel ha comenzado a elaborar mapas de las partes de Cisjordania que pretende anexar en el marco del nuevo plan de paz presentado a finales de enero por el presidente de EE.UU., Donald Trump, según lo anunció el sábado el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
“Estamos en medio del proceso de mapear el territorio que será parte de Israel de acuerdo con el plan de Trump”, afirmó Netanyahu en un acto de campaña del partido Likud en el asentamiento de Ma’ale Adumim. El primer ministro precisó que el proceso “no tomará mucho tiempo” y se completaría “en unas pocas semanas”.
Por su parte, Nabil Abu Rudeineh, portavoz del presidente palestino, Mahmud Abbás, respondió advirtiendo que el “único” mapa que puede aceptarse es el del Estado palestino establecido según las fronteras de 1967, con Jerusalén como su capital. En este sentido, aseveró que los líderes palestinos ignorarán cualquier alteración del mapa internacionalmente reconocido.
“El mapa del Estado de Palestina es el mapa reconocido por el mundo en conformidad con las resoluciones de las Naciones Unidas, y es el único que puede lograr la seguridad, la paz y la estabilidad en la región y el mundo”, enfatizó el vocero, agregando que “cualquier otro mapa significa la continuación de la ocupación [israelí] y no puede ser aceptado”.
El ‘acuerdo del siglo’ de Trump
El pasado 28 de enero, Donald Trump presentó su plan de paz para resolver el conflicto entre Israel y Palestina, que contempla una solución de dos Estados: uno israelí y uno palestino, con capital en Jerusalén Este.
Según el proyecto, que han calificado como ‘el acuerdo del siglo’, los asentamientos israelíes en Cisjordania serán reconocidos a cambio de que durante los próximos 4 años su construcción sea congelada. Según Trump, Palestina duplicará su territorio tras el acuerdo.
Al mismo tiempo, el presidente estadounidense ha indicado que su iniciativa prevé que Jerusalén sea “la capital indivisible” de Israel.
RT