Alimentos contra la retención de líquidos

La retención de líquidos es un problema molesto que afecta a muchas personas. Si los tobillos o pies han aumentado su grosor y al tocarlos se marca el dedo por un segundo, el motivo puede ser un edema, popularmente conocido como retención de líquidos, que es la acumulación de éste entre los tejidos.

Sus causas son variadas: consumo de alimentos ricos en sal, o problemas circulatorios, pero existen alimentos que pueden ayudar a eliminar toda esa agua que está de más en nuestro cuerpo.

La nutrióloga Taiana Ubiñas, afirma que “más que ingerir alimentos ricos en agua en su composición nutricional, es importante la eliminación de alimentos procesados o de un alto contenido de sodio, además de que es sumamente importante determinar la causa que lo origine, desde situaciones patológicas hasta los malos hábitos, por ello ya cuando el profesional determina la causa, entonces hace el protocolo de tratamiento que en muchos casos requiere de ayuda con medicamentos”.

Explicó que si la retención de líquidos es por malos hábitos (alimentarios, sedentarismo, etc.) entonces la dieta diaria, el aumento en el consumo de líquidos y alguna actividad física, serían de gran ayuda.

“Sin embargo podemos mencionar algunos alimentos que utilizamos en combinación con otras medidas, como: la sandía, tomate, piña, naranja, lechuga, espinacas, repollo, melón, fresas, kiwi, los hongos, entre otros”.

Aunque suene contradictorio es esencial consumir mucha agua e infusiones, debido a que facilita la actividad renal del organismo ayudando a eliminar más líquidos. “Además del edema, consumir estos alimentos puede darle un empujón a nuestro sistema urinario y favorecer las micciones”, resaltó la doctora.

UN APUNTE

Efecto contrario

También existen alimentos que producen el efecto contrario, es decir, que provocan que el cuerpo retenga líquidos, por lo que la doctora recomienda evitarlos.

Entre este grupo se encuentran: los embutidos, pues la sal es fundamental en elaboración de estos puesto que interviene en la curación.

Alcohol: en este caso, aunque no tiene que ver el sodio, su consumo en exceso provoca problemas en el hígado.

“Asimismo se deben evitar los dulces, los azúcares, los enlatados, etc.” afirmó.

El Nacional