Con las medidas para prevenir el coronavirus, que prohíbe que los vagones acojan gran cantidad de pasajeros y que el servicio sea hasta las 6:00 de la tarde, de lunes a viernes, en las diferentes estaciones del Metro de Santo Domingo las extensas filas que se forman hacen que sus usuarios permanezcan en línea hasta más de una hora para poder abordar un tren.
Aunque en la acera, próximo a cada estación, se señala con una línea gráfica amarilla en el pavimento la distancia que debe haber entre uno y otro usuario, la larga hilera sobrepasa significativamente las rayas pintadas y el trecho sugerido para disminuir la infección del COVID-19 regularmente es violentado.
Lo anterior obedece a que algunos usuarios no respetan la distancia y la multitud debe formar, muchas veces, dos filas por el poco espacio del contén, estructura vial que corresponde a todo peatón, incluyendo el que no va a utilizar el metro. Esos casos se dan en las avenidas Lope de Vega, en la estación Freddy Beras Goico, y en Hermanas Mirabal con Charles de Gaulle, en la Mamá Tingó.
Esa estación es una de las más concurridas y las hileras “asustan” a los pasajeros cuando estos hacen su llegada, incluso a las 6:30 a.m., media hora después de que se abren las puertas para ofrecer el servicio del medio de transporte.
“Esto está incómodo, uno dura una hora para coger el metro en ambos sentidos, en la mañana y en la tarde en las horas pico”, se queja Juan Rojas, quien es ingeniero civil.
Rojas expresa que aunque en cada parada se toman las medidas preventivas, “está la posibilidad” de contagio porque, según dice, en algunas ocasiones se satura el vagón de viajeros.
Elizabeth Alcántara, quien trabaja como secretaria en un centro de fisioterapia, dice que antes de utilizar su carnet, en el que muestra que trabaja en una clínica para que la exoneren de la fila, duraba 45 minutos para tomar el vagón del tren. Dice que últimamente “se están sobrepasando de personas” los trenes, lo que aumenta el riesgo de propagación del coronavirus.
Alcántara, quien debe utilizar las estaciones Juan Bosch, entre las avenidas Máximo Gómez y 27 de Febrero, y la José Francisco Gómez, en Villa Mella, afirma que muchas veces los Cesemt (los agentes del metro) no toman la temperatura a los usuarios.
El horario del Metro de Santo Domingo, antes de empezarse a ejecutar el primer estado de emergencia, el 19 de marzo, era de 6:00 de la mañana a 10:30 de la noche.
En el antepenúltimo toque de queda, que tuvo una vigencia de 14 días, en junio, el límite de horario del metro era hasta las 7:00 de la noche porque las restricciones del tránsito iniciaban a las 8:00 de la noche.
Actualmente el toque de queda, que concluye el 3 de septiembre, en el Gran Santo Domingo, inicia de 7:00 de la noche a 5:00 de la mañana.
Diario Libre